No seríamos artistas sin nuestros pinceles. Son la base de nuestras obras maestras, el medio por el que fluye nuestra inspiración, las herramientas que usamos para que nuestra imaginación cobre vida. Es importante que elijas los pinceles correctos en función del proyecto que vas a realizar. El tipo de pincel dependerá del tipo de pintura que uses, o incluso del soporte sobre el que vas a pintar. Los pinceles pueden ser planos, redondos o en abanico, y la lista continúa, así que tu elección de pincel no tiene límite. Sigue estos pasos para saber cómo cuidar los pinceles que tienes.

Los pinceles Reeves se ofrecen en distintas formas y tamaños para satisfacer tus deseos artísticos. Al usar pinceles diferentes, podrás perfeccionar tu trazo y comenzar a usar nuevas técnicas en tu mundo artístico. Al añadir pinceles a tu estuche de arte debes aprender a cuidarlos de forma adecuada, ya que son herramientas delicadas que deben limpiarse y guardarse correctamente. Si los guardas bien, no solo te durarán más tiempo, sino que continuarán ofreciéndote resultados maravillosos, proyecto tras proyecto, trazo tras trazo.

Cómo limpiar los pinceles

Cuidar tus varitas mágicas de arte es importante. Debes aprender a limpiar y guardar los pinceles de la manera adecuada después de cada proyecto para asegurarte de que estarán perfectos y listos la próxima vez que los uses. Cuando se trata de limpiar los pinceles, lo primero es lo primero. Tan pronto como termines de pintar, limpia el pincel antes de que se seque la pintura. Esta regla es especialmente importante si pintas con acrílico o acuarela, ya que estos componentes se secan muy rápido. Si no los limpias a tiempo, es posible que necesites comprar nuevos pinceles. Pero no pienses que te libras con el óleo. Aunque este medio tarde más tiempo en secarse que las otras pinturas, cuanto más tiempo dejes el pincel sin limpiar, más te costará hacerlo. Asegúrate de no descuidar tus pinceles y así alargarás su uso.

Ahora es el momento de aprender a limpiar los pinceles Reeves Reeves de forma adecuada. Por desgracia, un simple aclarado bajo el grifo no servirá. Sigue estos sencillos pasos para que tus pinceles estén siempre como nuevos.

• Coloca los pinceles entre una toallita de papel o un paño y retira con cuidado el exceso de pintura.
• Sumerge los pinceles en un tarro de agua limpia y dales vueltas para asegurarte de eliminar toda la pintura.
• Para el siguiente paso necesitarás jabón. Puedes sentirte más artista y usar un jabón especial, pero si no lo tienes, no te preocupes, podrás usar un jabón de manos normal o incluso champú. Aclara los pinceles con agua templada y añade después algo de jabón al pincel, frotando con los dedos suavemente para que el jabón limpie todas las cerdas. Aclara y repite.
• Asegúrate de llegar a la virola (la base del pincel) porque si no la limpias bien, se pueden acumular residuos y afectar a la forma de las cerdas hasta la punta.
• Antes de secar el pincel, asegúrate de que has eliminado toda la pintura. Repite el paso de jabón y aclarado tantas veces como sea necesario hasta que estés seguro de que no queda nada de pintura en el pincel.
• Cuando las cerdas estén totalmente limpias, sacúdelas y envuélvelas en un paño o toallita de papel y elimina con cuidado el exceso de agua.
• Deja los pinceles sobre una superficie plana y segura para que se sequen bien.
• Voilà! Tus pinceles están listos para la próxima expedición artística a través de tu colorida imaginación.

Cómo guardar los pinceles

Has aprendido a limpiar tus preciosas varitas mágicas de creatividad, así que ahora es el momento de aprender a guardar de forma adecuada estas delicadas herramientas. Cuando se trata de guardar estos preciados utensilios visionarios, debes recordar que no debes guardarlos en ningún sitio que pueda exponerlos a daños. Si tienes un espacio de trabajo del que surge toda tu magia creativa, simplemente puedes dejarlos horizontalmente en la superficie de trabajo, o si no, en una estantería.

Lo más importante es que te asegures de que las puntas de los pinceles no se apoyen unas en otras ni que toquen nada, ya que esto podría dañar las cerdas, que podrían perder su forma. Hay otras maneras de guardar los pinceles Reeves si no los quieres dejar al aire. Los portapinceles son ideales no solo para protegerlos, sino para tenerlos organizados. Una excelente adición a tu estación de trabajo. Si eres un artista ordenado, ¿por qué no te compras una caja de pinceles son portapinceles individuales para guardar de forma segura estas preciadas herramientas?

A algunos artistas les gusta enrollar los pinceles en fundas de lienzo o de bambú. Algunas fundas, ideales para transportar los pinceles, incluso incorporan bolsillos para que los pinceles estén totalmente protegidos.

En Reeves, creemos que las herramientas que usamos como artistas son tan importantes como las obras de arte que creamos. Sin nuestros ingeniosos utensilios, nuestro arte no existiría. Por lo tanto, debemos cuidarlos con mimo y asegurarnos de que duren y siempre estén preparados para el próximo trazo maestro. Con unos pinceles cuidados con mimo, puedes dejar volar tu imaginación y dejar que tus dedos hagan el trabajo mientras posar el pincel en el soporte y creas magia llena de color e ingenio en la página que tienes delante.